
Confianza en medio del peligro
«Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí; mi gloria, y el que levanta mi cabeza.»
Salmos 3:3
En medio de las más grandes adversidades, Dios está con nosotros. Ahora pregunto: ¿por qué nos da miedo en situaciones difíciles? El miedo es un mal que quita la paz, nos paraliza y, en otras palabras, nos «desorienta».
¿Cómo podemos tener paz en medio de la tormenta? Paz significa experimentar tranquilidad en medio de la oposición. Aunque no siempre encontramos sentido, la paz nos permite estar tranquilos incluso en medio de los problemas. En el Salmo 3, escrito por el rey David, podemos aprender cómo enfrentar situaciones extremas y vivir en paz.
Aunque muchos le decían a David que «no había ayuda para él,» David sabía que Dios era su escudo. Bajo el ataque de sus enemigos, David sabía que solo necesitaba un escudo. Él sabía que Dios era su escudo. Esta no era una oración para pedirle a Dios que cumpliera esto; era una fuerte declaración: «Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí.»
El que levanta mi cabeza es quien me da la victoria. ¡Qué confianza! ¡Pudo dormir bien a pesar de la oposición abrumadora de sus enemigos!
Cuando aprendemos a caminar con Dios, nuestra fe va creciendo hasta el punto en que nos sentimos seguros. Esta tranquilidad solo la conseguimos en Dios. Confiar en Dios trae paz a nuestro corazón. Cuando confiamos en Dios y depositamos en Él nuestra fe y descanso, es porque entendemos que Él está de nuestro lado. Eso lo sabía el rey David, por eso él dijo: «Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.» ¡No temeremos ante nada que se levante!
Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
Romanos 8:31